La decisión de Esperanza Aguirre de adelantar el ‘adiós’ del nuevo presidente de Libertaddigital.com, Francisco Cabrillo, como máximo responsable de Centro Económico y Social (CES) de la región previsto para julio e imponer en este cargo a su mentor político, Pedro Schwartz, ha desatado las críticas entre los sindicatos. “Es un hombre de broncas y con ideología preconstitucional”, han asegurado a EL BOLETIN fuentes de CCOO que denuncian irregularidades en este proceso de elección. Desde el CES aún no se ha confirmado este nombramiento.
El pasado 29 de diciembre el Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid cesaba a Francisco Cabrillo como presidente del CES ante su ascenso en el portal de internet que en su día fundó Federico Jiménez Losantos y la consiguiente incompatibilidad de cargos. Una decisión que debería haber puesto en marcha el proceso de sucesión, pero esto no sucedió.
Según ha denunciado a este diario el secretario de Política Institucional de CCOO de Madrid, Jaime Cedrún, Cabrillo, ya cesado, convocó un pleno el pasado lunes por la tarde “sin la pertinente potestad y sin informar al Grupo Sindical que forma parte del CES” para elegir a su sustituto: Pedro Schwartz.
Un nombramiento que para los sindicatos ha sido impuesto por la propia Esperanza Aguirre. Y es que, el economista y patrono de la Fundación FAES está considerado en los círculos conservadores como el mentor político de la presidenta de la Comunidad de Madrid.
Más allá de la relación de Schwartz con Aguirre, los sindicatos denuncian los “defectos de forma” que se han producido en esta elección: sin información previa ni comunicación oficial, el proceso lo ha puesto en marcha el presidente ya cesado y no se han dado los habituales pasos en este tipo de nombramientos, entre otros puntos.
Por todo ello, CCOO y UGT están esperando que desde el CES se anuncie oficialmente que Schwartz es el nuevo presidente, algo que este consejo aún no ha confirmado a este diario, para “denunciarlo e impugnarlo”.
Dejando de lado la forma en la que Schwartz, según los sindicatos, se ha alzado con la presidencia de este órgano de participación tripartito y de carácter consultivo de la región en materias económicas y sociales, otras fuentes sindicales remarcan que se trata de un “hombre de broncas, con una ideología preconstitucional y que acusa a los representantes de los trabajadores de ser una rémora para el crecimiento económico”.
El CES, según se puede leer en su web, busca “servir de cauce de participación y diálogo de los interlocutores sociales -empresarios, sindicatos, y expertos de reconocido prestigio- en el debate de los asuntos económicos y sociales, haciendo llegar al Gobierno regional las reflexiones y sugerencias de los mismos”.
