La vicepresidenta recrimina a Cayo Lara que pida acabar con la compatibilidad de los sueldos públicos y privados de ambos exmandatarios y le pide “menos pose y más trabajar”. La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha defendido las pensiones vitalicias que reciben los expresidentes José María Aznar y Felipe González y que compatibilizan con las retribuciones que cobran de la empresa privada. Y es que, según ha recordado la ‘número dos’ del Ejecutivo a pregunta del líder de IU, Cayo Lara, España “no es la excepción” en este asunto.
Estos sueldos vitalicios son “la regla general en países democráticos” como Francia o Reino Unido, aunque “a lo mejor está usted más cómodo con otros Estados en los que la figura del presidente del Gobierno es vitalicia”, le ha recriminado Santamaría a Lara.
La vicepresidenta también ha recordado que estas dotaciones existen desde el año 1983 y que sirven para que Aznar o González puedan prestar sus funciones “de representación a la democracia que les ha votado y al Congreso que los ha elegido”. Asimismo, ha recordado al dirigente de IU que su partido, junto a Bildu, “es el único que se ha levantado de la mesa de regeneración democrática donde estamos todos los demás tratando de aprobar medidas”.
“Menos pose y más trabajar”, le ha reclamado Santamaría a Lara.
Por su parte, el máximo responsable de IU ha solicitado que el Consejo de Ministros apruebe la incompatibilidad de los expresidentes “de recibir sueldo vitalicio de casi 75.000 euros cada uno con su actividad” en la empresa privada. Unas retribuciones por las que Lara se ha preguntado “a quién sirven” Aznar y González, si “¿al interés general o al interés de los accionistas?”.
Por ello, ha propuesto que “si trabajan en el sector privado que se les retire sueldo vitalicio y si quieren este sueldo que se retiren del sector privado”.
