Según ha confirmado el portavoz de Michel, ambos dirigentes se reunirán el próximo martes 6 de abril con el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, en una cita que sigue la estela marcada por el último Consejo Europeo en el que los líderes de la UE aprobaron el plan de acercamiento a Ankara, que incluye explorar opciones para renovar el acuerdo migratorio y una modernización del régimen de aduanas.
El plan presentado por la diplomacia europea que dirige el Alto Representante, Josep Borrell, plantea incentivos a Ankara para una oferta positiva con la que normalizar la relación tras las turbulencias vividas en el Mediterráneo oriental el pasado año por las disputas con Grecia y Chipre.
La idea de Bruselas es ofrecer un acercamiento gradual, sin renunciar a adoptar sanciones si se produce un giro por parte de Erdogan. El propio Borrell señaló que deberían irse cumpliendo una serie de hitos para desarrollar la oferta, entre los que mencionó la buena marcha del diálogo con Grecia, el proceso diplomático en Chipre, la situación en Libia o la evolución de los asuntos internos turcos.
El objetivo es seguir de cerca el comportamiento de Ankara antes de lanzar una negociación sobre el pacto migratorio, uno de los asuntos capitales para Bruselas que quiere zanjar cualquier potencial crisis como la vivida hace un año, cuando Erdogan aseguró que no estaba en disposición de controlar el flujo migratorio a Europa.
Por su parte, las autoridades turcas exigen que el buen clima de los últimos meses se traduzca en pasos concretos de la UE y no renuncian a demandas como la revisión de la política de visados.
