Aún no se ha cumplido un mes desde el debut bursátil de eDreams y las posiciones bajistas sobre su capital alcanzan máximos insólitos semana tras semana. Los especuladores se disponen a aguar la efeméride. La última compañía en aterrizar en Bolsa española se aproxima a su primer mes de cotización. Una efeméride que los especuladores parecen querer teñir de rojo intenso a sólo unos días de su celebración. Nunca antes en su corta trayectoria bursátil eDreams Odigeo había registrado tanta presión bajista sobre su accionariado.
Los últimos datos de recuento de especuladores de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) lo han confirmado: le tienen echado el ojo a eDreams, la última incorporación del parqué madrileño. A pesar de que desde la fecha de su debut la compañía acumula una revalorización ligeramente superior al 8%, las carteras de inversión más arriesgadas parecen estar convencidas de que pronto le tocará tomar tierra a la web de reservas de vuelos y otros productos turísticos.
A lo largo de las últimas sesiones, el saldo de posiciones cortas no ha hecho más que incrementarse. Y siempre, bajo la pauta marcada por los gestores del fondo alemán Steadfast Capital Management. La rama del fondo que ha tomado las posiciones cortas sobre la cotizada española tiene sede en Londres y tiene bajo gestión un total de 193 millones de euros, según datos publicados en su propia página corporativa.
Hoy por hoy, y a sólo dos días de que eDreams celebre un mes en Bolsa, la apuesta de Steadfast contra su gráfica de cotización alcanza ya un 0,87% de su capital. Un porcentaje que se traduce en 9,67 millones de euros en función de los actuales precios de mercado. Precios que, más allá de la remontada que suponen desde el último precio el día de su estreno apenas superan en un 3,4% los 10,25 euros a los que se colocó cada una de las acciones de la compañía antes de su puesta de largo en el Palacio de la Bolsa de Madrid.
Los germanos revelaron su apuesta bajista el mismo día en que la compañía debutó. Sin embargo, el fiasco de sus primeros cruces no ha sido suficiente para los especuladores, sino que se han convertido en impulso para incrementar hasta en tres ocasiones ya su pesimista posición en corto. Mientras el Ibex 35 sigue escalando posiciones, los analistas apuntan a que las pérdidas de la compañía y su elevado endeudamiento siguen sin prometer escapadas alcistas para su amenazada gráfica.