Inypsa pasea al borde del precipicio con descalabro en Bolsa. La constructora ha caído con fuerza tras reconocer que necesita una ampliación de capital para seguir en pie. Inypsa está al borde del precipicio. Las pérdidas acumuladas a lo largo de 2013 la han puesto en causa de disolución y la constructora se ha visto obligada a solicitar la complicidad de sus accionistas para lanzar una ampliación de capital que la salve del abismo. Una llamada de auxilio que se ha saldado con caídas de hasta el 12% en Bolsa.
La firma de construcción e ingeniería ha sido este martes la más castigada de todo el Mercado Continuo. El precio de sus acciones ha caído hasta los 0,84 euros, colocándose al filo de igualar sus mínimos de este año 2014 en el que no hace mucho conseguía recuperar la ansiada cota del euro por acción. La desbandada inversora se ha dejado sentir también en un volumen de negociación que casi triplicaba la media del valor.
Con el mercado ya cerrado a negociación ayer lunes, Inypsa remitió a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) un escueto comunicado para acompañar el orden del día de su próxima junta de accionistas. Pocas palabras pero suficientes para explicar que si no sale adelante un “preceptivo” aumento de capital de 29,925 millones de euros habrá que decantarse por un “acuerdo de disolución”.
El patrimonio neto de la sociedad, tras haber digerido las pérdidas del último ejercicio, ya ni tan siquiera alcanza la mitad del capital social, se ha explicado a la CNMV. Al son de este jarro de agua fría, la capitalización bursátil de la compañía se ha reducido a 20 millones de euros.
La cita clave para dirimir el futuro de la compañía tendrá lugar el próximo 25 de abril, fecha que la cotizada ha escogido como primera convocatoria de su junta. Los directivos de Inypsa advierten incluso de que las “actuales circunstancias del mercado podrían dar lugar a una suscripción incompleta que no lograra el fin propuesto” y provocara la liquidación de la compañía pese al esfuerzo de resarcir una pérdidas de más de 13 millones de euros en 2013 que “casi triplican los números rojos del año anterior”.
Sin embargo, las alternativas de futuro que se le abren a Inypsa van más allá de la ampliación o la disolución. En este sentido la compañía ha informado de que se sigue negociando una refinanciación de deudas con los acreedores que pasaría por la entrega en pago de su participación en el Instituto de Energías Renovables, un movimiento “que permitiría el registro contable del aumento del valor de la participación y el reequilibrio patrimonial” del maltrecho grupo constructor.
A cierre de sesión de este jueves, han cambiado de manos 297.073 acciones de Inypsa cuando lo habitual es que en una sola sesión no se negocien muchos más de 100.000 títulos. Renta 4 se ha colocado como el comprador más activo, mientras que las ventas que presionaban con fuerza la gráfica de la compañía las ha liderado CaixaBank.







