Los hijos del presidente de Martinsa-Fadesa abandonan su consejo de administración. Se marchan sólo una semana después de que la inmobiliaria incumpliera su pacto de pagos a acreedores. El consejo de administración de Martinsa-Fadesa cuenta desde este lunes con dos sillas libres. Las mismas que hasta ahora ocupaban los hijos del presidente de la maltrecha inmobiliaria. Su salida se produce por motivos de residencia a sólo una semana de que la compañía se reconociese incapaz de cumplir su plan de pagos a acreedores.
Los dos hermanos, Fernando y Javier Martín del Agua, han notificado a sus compañeros en el consejo de administración su renuncia por no poder compatibilizar su residencia fuera de España con los cargos que les correspondería, según se ha explicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Aunque comunicadas por distintas vías, los motivos argumentados para su partida son los mismos.
El primero de ellos, Javier Martín del Agua, ha dimitido como vocal porque sus “compromisos laborales le impiden compaginar de una forma adecuada las labores de consejero”. Mientras tanto, el segundo ha sido cesado por la sociedad FT Castellana Consultores Inmobiliarios con la que la saga de empresarios vehicula su inversión en la ‘ladrillera’. Además, aún no se ha designado a ningún sustituto para su asiento.
No pasa desapercibido el hecho de que las dos renuncias llegan apenas una semana después de que Martinsa-Fadesa aplazara uno de sus pagos a acreedores contemplados en el convenio que le salvó del concurso más multimillonario de la historia empresarial española. Aunque este desvío no pone en peligro el reflote de la compañía, si se tuviera que ver obligada a retrasar abonos una vez más, la liquidación de la firma que preside Fernando Martín sería inminente.
