La enérgica remontada de precios de la semana pasada ha dado lugar a una sonora corrección de la euforia. El Ibex cierra con un retroceso acumulado del 1,86% en los 9.815,5 puntos. La Bolsa española no ha sido capaz de aguantar el ritmo alcista. Tras nueve sesiones consecutivas de vértigo comprador, esta semana ha llegado el turno de corregir la euforia y el Ibex 35 cierra con una caída acumulada del 1,86%. La gráfica del selectivo madrileño vuelve a perder de vista los ansiados 10.000 puntos.
A imponer la cautela entre los inversores han contribuido unas cifras macro para el Viejo Continente menos amables que las de la semana pasada. En muchos casos, las cifras publicadas no han conseguido cumplir con las previsiones de los analistas, imponiendo las ventas, especialmente en los valores más cíclicos. En este sentido, la banca ha sufrido el anuncio de una nueva ronda de test de estrés en los que se analizará al detalle la exposición de su balance a la deuda soberana europea.
El Ibex 35 ha cerrado este viernes con un retroceso del 1,01% que ha dejado su gráfica en los 9.815,5 puntos. A una más que prudente distancia de los 10.000 puntos que la semana pasada celebraba el parqué madrileño. En esta ocasión, el índice Ifo de confianza publicado en Alemania ha pesado sobre las carteras de inversión, inclinándolas una vez más por las ventas ausentes durante la semana pasada.
A la cabeza de las caídas se han colocado IAG (-4,2%), Bankinter (-3%), Sacyr (-2,6%), Banco Popular (-2,6%) y Dia (-2,5%). Han caído también las acciones de CaixaBank (-2,4%) y BBVA (-2,3%) que este mismo viernes han presentado sus cuentas del tercer trimestre del año. En ambos casos, más amables que las de hace un año pero insuficientes para el mercado.
Las que sí han logrado esquivar la tendencia bajista dominante han sido FCC (+3,4%), Técnicas Reunidas (+1%), Amadeus (+0,8%), Ebro Foods (+0,7%) y Enagás (+0,5%). La primera de ellas ha cerrado la semana con una revalorización próxima al 15% en la que ha sido la noticia financiera de la semana: la entrada del Bill Gates en el capital de la constructora española.







