La aplastante victoria electoral de Angela Merkel en las federales alemanas ya empieza a tener respuestas. El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, acaba de anunciar que está dispuesto a volver a ofrecer financiación barata a los bancos siempre y cuando se considere necesario. Una posibilidad que no se había vuelto a barajar desde febrero de 2012.
En una comparecencia ante el Parlamento Europeo, el italiano Draghi ha dicho que en Fráncfort todo esta dispuestos para “utilizar cualquier instrumento, incluido otro LTRO si es necesario, para mantener los mercados monetarios a corto plazo en el nivel que está garantizado por nuestra evaluación de la inflación en el mediano plazo”. Una larga sentencia que se resume en que el BCE está de nuevo dispuesto a abrir la ‘barra libre’ de liquidez para los bancos de la Eurozona siempre y cuando no corra peligro el margen del 2% de inflación que se ha marcado el organismo monetario.
El presidente del BCE además calificó de “injustificadas” las tasas que el mercado monetario europeo llegó a marcar a principios del verano, con el miedo a que la Reserva Federal de EEUU comenzase a retirar estímulos económicos al otro lado del Atlántico. Aunque estas tasas se han suavizado desde entonces, sobre todo desde la reafirmación de las medidas de Bernanke, el exceso de liquidez en el sistema financiero se sigue aproximando a la cota de los 200.000 millones de euros que la entidad central ha marcado como mínimo para lanzar nuevos capítulos de financiación a bajo coste.
A pesar de este anuncio, el economista italiano ha declarado que el reembolso parcial por el que ya han optado varias entidades de la Eurozona de los capitales que recibieron en diciembre de 2011 y febrero de 2013 es “sin duda un signo de la normalización”, esto podría volver a “impulsar” las tasas del mercado monetario, como por ejemplo el índice Euríbor al que están referenciadas buena parte de las hipotecas suscritas en los 17 países de la moneda única.
Precisamente para evitar tensiones en estas tasas monetarias, Draghi también ha reafirmado que los tipos oficiales del BCE seguirán en mínimos históricos por “un periodo prolongado”. Algunos analistas han llegado incluso a barajar la posibilidad de que en próximas reuniones del organismo, el precio del dinero baje incluso más, a cotas hasta ahora desconocidas desde la creación del euro.







