El Ibex 35 no está en su mejor momento. La posibilidad de que EEUU retire sus estímulos a la economía y las dudas que giran en torno a Grecia por las turbulencias que atraviesa su Gobierno han llevado al selectivo español a mínimos del año, cerrando la semana con una caída del 4,59% y 7.700 puntos. No obstante, el temor que ha invadido a los inversores no ha influido en gran medida en la prima de riesgo española, que logra mantenerse en los 315 puntos básicos.
La mala marcha de la Bolsa española el último día de la semana se ha sumado a las pérdidas del jueves, cuando registró la segunda mayor caída del año (3,41%). El 2013 comenzó con 8.167 puntos, aunque su mejor cota la alcanzó el 25 de enero, cuando sumó 8.724 puntos. Sin embargo, el próximo lunes abrirá en 7.700 puntos, lo que significa su cota más baja del año y se acerca a los resultados obtenidos el pasado noviembre.
No obstante, la inestabilidad no sólo se ha vivido en el parqué madrileño, sino que también ha afectado a la mayoría de las grandes plazas bursátiles europeas, que tras pasar el viernes oscilando entre el rojo y el verde cerraban finalmente con fuertes pérdidas. De esta forma, a la bajada del 1,56% del Ibex en esa última jornada de la semana se sumaba el 1,2% que se dejaba el CAC 40 de París y el 1,76% del Dax alemán. Asimismo, el FTSE 100 británico perdía cerca del 0,70%, mientras que Milán, una de las más perjudicadas, caía un 1,89%.
Todo ello por las dudas que se ha sembrado en el viejo continente la situación de Grecia. El primer ministro, el conservador Andonis Samarás, intenta llegar a un acuerdo con su socio socialdemócrata, Evángelos Venizelos, para formar un Gobierno bipartito, ya que el partido de la izquierda moderada ha decidido abandonar el Ejecutivo. Además, en medio de esta convulsión, el Fondo Monetario Internacional (FMI) ha alertado de que podría suspender los pagos de la ayuda a Grecia si los socios del euro no hacen frente a un déficit de financiación de 4.000 millones de euros en el programa de rescate.
Es más, la situación tampoco parece mucho mejor al otro lado del Atlántico. Wall Street vivió una jornada tranquila este viernes tras la tormenta desatada por la decisión de la Reserva Federa l (FED), que anunció que empezaría a moderar el volumen de compra de bonos del país, actualmente en los 85.000 millones de dólares al mes, para concluir de manera progresiva a mediados de 2014. Es decir, que iba a limitar sus estímulos a la economía.
De esta forma, la principal referencia del parqué neoyorquino, el Dow Jones, cerró con un ascenso del 0,28 % un día después de haber retrocedido con fuerza y perdido más de 350 puntos, con lo que terminó la semana con su peor descenso semanal desde abril.
Por su parte, el selectivo S&P 500 subió el 0,27 % para cerrar con un descenso acumulado del 2,11 % en los últimos cinco días, mientras que el índice compuesto del mercado Nasdaq se dejó el 0,22 % y terminó con una caída semanal del 1,94 %.
