Abengoa tiene previsto emitir 430,4 millones de nuevas acciones con cargo a reservas para dotar a más liquidez a sus acciones de clase B, actualmente en manos del fondo estadounidense First Reserve, que entró en la sevillana el año pasado con una inversión de 300 millones.
Dicha ampliación liberada supondrá la entrega de cuatro acciones de clase B (con derechos de voto reducido) por cada título, independientemente de la clase que sea. La compañía sevillana ha indicado en un comunicado a la CNMV que someterá esta operación a la aprobación de sus accionistas en una junta extraordinaria prevista para el 30 septiembre, a pesar de que ya cuenta con el respaldo de Inversión Corporativa IC (vehículo de la familia Benjumea) y del fondo estadounidense, que controlan conjuntamente el 63% de los derechos de voto de la sociedad.
Los analistas de Inverseguros recuerdan que dichas acciones cuentan con los mismos derechos económicos que las de clase A pero con una centésima parte de los derechos políticos. La operación, por tanto, se trata de una ampliación liberada de acciones de clase B por lo que tendrá efecto dilutivo en todas las medidas sobre acciones de la sociedad.
«La medida entendemos que obedece a un deseo por hacer más cómoda la presencia de First Reserve en el capital y facilitar la negociación (¿interés por salir?) de las acciones de clase B de Abengoa. Es por esto que valoramos negativamente la noticia, por la incertidumbre que creemos despierta en torno a la permanencia de First Reserve en el capital», añaden los mismos expertos.
El anuncio de la ampliación de capital ha frenado el rally que se había apuntado la compañía sevillana en la Bolsa en las últimas sesiones. Sus títulos cedían un 2,5% en los primeros compases de la negociación, en un Ibex 35 que registraba ligeras pérdidas.
