Los especuladores parecen haber cambiado de estrategia en el mercado de divisas para saludad al Eurogrupo, aunque no de objetivo: el debilitamiento del euro como moneda de reserva. Ahora el ataque tiene lugar en los cruces entre la moneda única y el yen.
Una cotización de suma importancia de cara a los movimientos de los bancos centrales asiáticos, que últimamente habían apostado por la divisa del BCE y que pueden tener que reorientar sus reservas si la presión se mantiene.
La ventas que se producen en este mercado, activo toda la jornada, no se habían registrado desde mayo de 2011. Tampoco se había vuelto a ver una actividad tan frenética desde enero del pasado año. Al menos, según los comentarios al respecto que recogía hoy el portal especializado fxstreet.com.
En lo que va del mes de julio la cotización del euro frente al yen ha pasado de 100,88 unidades a las 97,843 que marcaba al cierre de esta edición. Cerca de un 3% de caída que puede ampliarse en los próximos días si las expectativas al respecto se cumplen.
En cambio, no se esperan muchos movimientos en los cruces del euro y el dólar que ya fueron explotados al máximo la pasada semana por los operadores de divisas más arriesgados. Si ven más probabilidades de que haya algunas tensiones en el mercado del franco suizo. Aunque gran parte de lo que pase va a depender del resultado
