Las turbulencias del mercado y la escasa confianza de la banca inversora no solo se han llevado por delante el debut bursátil de Loterías y Apuestas del Estado. Hasta la semana pasada, un total de 160 compañías habían decidido suspender o, en el mejor de los casos, posponer su puesta de largo para los inversores. El año que se prometía como uno de los más prolíficos en OPV se aproxima por momento a la cifra récord de suspensiones alcanzada el año pasado.
Según datos compilados por la agencia Bloomberg, el importe que se ha dejado de colocar en los mercados por suspensión y atraso de salidas a Bolsa es ya de 25.000 millones de euros. Una cifra muy cercana a los 29.000 alcanzados por la suma de las operaciones fallidas de 2010, cuando esta marca registró el récord histórico.
En Europa Occidental, donde la volatilidad y la especulación se han mostrado con todo su ímpetu en los mercados financieros, se han producido el 15% de los intentos fallidos de salida a Bolsa a escala global. Sin embargo, ninguna región -a excepción del pujante parqué de Hong Kong- se ha salvado de esta suerte de pandemia de los mercados.
En EEUU, el volumen en efectivo de las salidas a Bolsa que hasta ahora han quedado en el aire ha alcanzado cifras de 2006. Algunas de las compañías que han retrasado o suspendido su desembarco en el parqué neoyorquino han sido ADS Tactical, Living Social, Groupon, Trustwave e incluso la popular red social Facebook.
A este lado del Atlántico, entre las víctimas de unos bancos inversores que no están dispuestos a pagar tanto como las compañías quisieran por entrar en su capital se encuentran nombres como la española Atento, la rusa Nord Gold, la alemana Osram, la francesa Verallia, el club británico de fútbol Manchester United y la más reciente: la estatal Loterías.
Ni siquiera la pujante economía china se ha visto libre de estos retrasos y el grupo de restauración Xiao Nan Guo, con sede en Shanghái, tuvo que abandonar su empeño de cotizar en el parqué de una de las tres ciudades más globalizadas del ‘Gigante Asiático’.
En nuestro país, el gran desfile de OPV que se esperaba en la Plaza de la Lealtad parece que no llegará nunca. Las expectativas de recuperación económica que se mantenían al comienzo del año llevaron a muchas compañías a plantearse o retomar su puesta de largo, pero el panorama ha sido muy distinto.
Tan sólo han llegado al Continuo tres nuevos inquilinos: Dia, Bankia y Banca Cívica. En el primer caso, la operación se trató únicamente de un ‘listing’, mientras que en las dos entidades primó la necesidad de hacerse con nuevos fondos a pesar de la escasa valoración cosechada por ambas dos. Con este panorama, parece que habrá que esperar a tiempos mejores para ver a Talgo, Renovalia o BMN en las gráficas del parqué nacional.
