El dólar ha perdido peso en el mercado de divisas. Según los últimos datos publicados por el Banco Internacional de Pagos (BIS), de 2007 a 2010, el 85% de las transacciones sobre divisas incluían al billete verde, cinco puntos porcentuales por debajo del 90% correspondiente a las operaciones realizadas tres años antes.
En cambio, el euro aumenta dos puntos porcentuales su protagonismo, hasta alcanzar el 39%, mientras que el yen también aumentó su cuota de mercado en dos puntos porcentuales, hasta el 19%, una recuperación con respecto a la encuesta de 2007 pero todavía por debajo de su pico de 23,5% alcanzado en 2001.
El mercado de divisas mueve de media unos cuatro billones de dólares al día. Esta cifra supone un incremento del 20% respecto a 2007, año en el que el organismo publicó su último informe sobre este mercado. Pero el ritmo de aumento se ha moderando, pues de 2004 a 2007 creció un 72%.
El BIS señala en este sentido que hasta 2007 el brusco crecimiento de la actividad en el mercado de divisas se vio impulsado por los “bajos niveles de volatilidad en los mercados financieros y en la aversión al riesgo, y por la expansión de la actividad de los ‘hedge funds’”.
En los tres últimos años la crisis financiera ha disparado tanto los niveles de volatilidad como la aversión al riesgo. En concreto, y según datos de JPMorgan Chase, la volatilidad implícita en las opciones sobre las principales divisas se ha incrementado desde el 9% hasta el 12,25%. Y en octubre de 2008, como consecuencia de la quiebra de Lehman Brothers, alcanzó el 26,6%.
La transacción de divisas es mucho mayor que la negociación de acciones estadounidenses, cuya media diaria en abril se situó en 134.000 millones de dólares, según los datos compilados por la Asociación de la Industria de Valores y Mercados Financieros. El volumen medio de la compra y venta de instrumentos del Tesoro de EEUU, uno de los mayores mercados del mundo, fue de 455.000 millones al día en abril, frente a su promedio de 570.000 millones en todo 2007.
