La CNMV interroga a la constructora que preside Manuel Manrique sobre los criterios aplicados para la contabilización del valor de su inversión así como de la deuda asociada. Sacyr abre sesión con caídas superiores al 1% que prácticamente duplican las del Ibex 35 a la misma hora al encajar las nuevas sombras que ahora despierta el supervisor del mercado en torno a su participación inversora en Repsol.
Si bien hace unos días corrió el rumor de que había provisionado parte de su 8,5% de su participación en la petrolera, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha requerido información adicional sobre la contabilidad en el balance de la constructora de este abultado paquete que en los últimos meses ha marcado el rumbo de cotización de la presidida por Manuel Manrique.
El requerimiento del organismo supervisor se refiere específicamente a los criterios contables aplicados a cierre del ejercicio 2014 así como los tenidos en cuenta en los nueve primeros meses del año pasado. Los requerimientos se extenderían también hacia el estado de la deuda vinculada a la compra de esas acciones, cuya amortización de intereses se venía realizando fundamentalmente gracias al dividendo en efectivo de la petrolera que preside Antonio Brufau y que a consecuencia del desplome del crudo se ha visto forzada a rebajar sensiblemente.
Esta no es la primera vez que el regulador requiere información a Sacyr sobre sus posiciones en Repsol. Las exigencias de datos adicionales más recientes se remontan al tiempo en el que la petrolero sufrió la expropiación de su entonces filial argentina YPF por parte del Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner. Desde Ahorro Corporación Financiera calculan que la cuestionada inversión tiene un impacto final sobre el balance de la constructora de cerca de un euro negativo.
