Gracias al repaso de los diarios digitales nos enteramos que Mario Conde no ha roto su relación con la masonería. Por lo menos eso es lo que dice elconfidencialdigital.com que explica que “el actualmente líder de la formación política Sociedad Civil y Democracia, y tertuliano habitual de la cadena Intereconomía, colabora con la Gran Logia Española, asesorando mediante conferencias y cursos a nuevos masones jóvenes que ingresan en la organización”.
Al parecer, a este diario online le han informado fuentes da la Gran Logia Española que Mario Conde “nunca ha dejado de ser masón, sino que pasó a una condición de masón ‘durmiente’ cuando tuvo sus problemas con el caso Banesto”.
Y le han contado “que Conde llegó a ascender al grado de Maestro de la Masonería” continúa participando en diversos actos, en concreto en “presentaciones y conferencias sobre lo que es y significa ser masón, orientados a jóvenes que entran a formar parte de la institución”.
Asegura que hay pruebas de estas actividades y muestra un vídeo publicado por la propia Gran Logia Española, de un acto que tuvo lugar en el verano de 2011. En las imágenes puede verse a Conde en la mesa presidencial, junto al conductor de la Clausura del I Encuentro de Masones Jóvenes.
Según las fuentes consultadas por este diario en Internet, Conde mantiene el contacto con dirigentes de la masonería, que recurren a él “por su extraordinaria capacidad de comunicación y su elocuencia”. Alguna de esas últimas intervenciones privadas se produjo “hace algunos meses” indican.
Recuerda este medio que el pasado verano, durante el mes de junio, Conde asistió también a la presentación de ‘Sombras de Acacia. Compás sobre escuadra’, un libro sobre poesía y masonería, escrito por el profesor de la Universidad Carlos III, de Madrid, Ilia Galán.
Explica, además, que “una de las pocas veces que Mario Conde ha sido preguntado sobre su condición de masón fue en la entrevista que concedió a Ernesto Sáenz de Buruaga en 2010.
En este encuentro Conde aseguró que en la masonería “unos buscan su refugio espiritual, cansados de buscar en otros lados”, y afirmó que la incompatibilidad de la masonería y el catolicismo “es un mito”.
En dicha entrevista, el exbanquero aseguró que “la masonería española se está reconstruyendo porque hay mucha gente que siente que le falta algo (…). Presiento que en los próximos diez años, si la masonería es capaz de un rearme moral y de explicar lo que son, y salir sin tapujos, conseguirán que, en la sociedad española, el que quiera caminar por ahí camine”.
