La prensa viene calentita. Una polémica sustituye a otra y hoy toca que la prensa conservadora se eche las manos a la cabeza por la posibilidad, defendida ayer por el ministro de Fomento, José Blanco, de que se suban los impuestos a los que más cobran para garantizar las políticas sociales.
Tanto El Mundo, como Abc y La Razón han criticado esta alternativa, que denominan como “engaño político” de un Gobierno al que califican de “manirroto”, “derrochador” y “máquina de endeudarse” y advierten que queda claro que la subida de impuestos afectará principalmente a las clases medias.
También El País hace notar ese riesgo. Considera que uno de los problemas es “que no es fácil delimitar ese colectivo” que el número dos del PSOE define como “las personas que tienen más renta” y se señala que como el Ejecutivo acaba de eliminar el impuesto sobre el patrimonio “si se decide por subir el IRPF, lo más probable es que el grueso de las subidas recaiga sobre las rentas medias”, subrayando que “los más ricos, además, tributan a través de sociedades de capital variable (sicav), que pagan sólo el 1% de impuestos”. El otro dilema sobre el que alerta el diario de Prisa es si una subida fiscal retrasaría la salida de la crisis y pone negro sobre blanco que “el Banco de España ya ha avisado de que futuras subidas de impuestos pueden acabar esterilizando los efectos expansivos” de las medidas de estímulo.
El otro asunto que manda en la prensa son los actos que en el primer aniversario del accidente de Spanair convocaron los familiares, cuyos rostros de dolor copan las fotos de la mayoría de las portadas. El País dedica un editorial en el que asegura que “la tragedia aérea de Barajas, causada por una mezcla de errores mecánicos y humanos, debe convertirse en el aldabonazo definitivo para que las autoridades españolas cambien las prácticas en el terreno de la prevención de accidentes aéreos”. e insta a “aprender de los errores” porque “lo ocurrido en Madrid no debería volver a repetirse”.
