La llamada del presidente de EEUU, Barack Obama, a Zapatero, apremiándole a tomar medidas para superar los problemas económicos que atraviesa España es hoy la noticia con la que abren los periódicos, conversación telefónica que El Mundo califica de “serio aviso de Obama a nuestro Gobierno” y que, en opinión de Pedrojota, “confirma que, desgraciadamente, España es ahora un problema económico mundial”, mientras que Abc lo que destaca es que el mandatario estadounidense se suma “a la ya larga lista de autoridades que han leído la cartilla a Zapatero por su pasividad ante la crisis”.
Y mientras el presidente de la nación más poderosa del mundo nos ‘canta las cuarenta’, va Baltasar Garzón y se le ocurre pedir el traslado temporal al Tribunal Penal Internacional (TPI) de La Haya como asesor, lo que ha caído como una bomba en la prensa conservadora y que ha encantado a El País. Para comprobarlo basta con echar un vistazo a los titulares de portada y a los editoriales. Dice Abc que “Garzón se va de la Audiencia antes de que lo echen” y califica su gesto de “operación de maquillaje”, de golpe de efecto ante la opinión pública, ya que de esta forma “Garzón amplifica su fama de juez global y aumenta el victimismo mientras que La Razón titula “Garzón burla al Poder Judicial” y acusa al juez de escudarse en “trucos de leguleyo”. El más duro, como era de esperar, dada la animadversión de Pedrojota hacia el magistrado, es El Mundo, que advierte que “Garzón hará un flaco favor a la causa de la Justicia universal al entrar en nómina del TPI, que sufrirá una grave merma de su prestigio si contrata a un persona con tres procedimientos abiertos”.
Acabamos como empezamos hablando de economía, pero para dar una opinión optimista, que falta hace, la que publica Felipe González en El País, en un artículo en el que asegura que “la UE, presidida por España, ha dado el paso necesario, y en el momento oportuno para defender al euro”.
