Un tribunal de París ha declarado este lunes culpable a Marine Le Pen, líder del partido Agrupación Nacional (AN), en un caso de malversación de fondos europeos que sacude nuevamente a la política francesa. Le Pen y otros ocho eurodiputados de su partido han sido condenados por desviar 2,9 millones de euros del Parlamento Europeo a través de un esquema de falsos asistentes parlamentarios.
La sentencia también afecta a doce asistentes que fueron contratados como parte del fraude y que, en realidad, trabajaban directamente para el partido. El caso, que se remonta a los años en que Le Pen era eurodiputada, pone en duda su futuro político a las puertas de las elecciones europeas.
Un sistema para «aliviar» las finanzas del partido
Según la acusación, Agrupación Nacional organizó un sistema de gestión centralizada para canalizar las dietas europeas destinadas a asistentes parlamentarios hacia empleados que realizaban funciones internas del partido. De esta manera, se falseaban contratos y funciones con el objetivo de «aliviar» la situación económica de la formación.
“Se trataba de un entramado estructurado que instrumentalizaba recursos europeos con fines partidistas”, señalaron fuentes judiciales
Consecuencias políticas: ¿inhabilitación para Le Pen?
Aunque la condena aún no es firme, Marine Le Pen se enfrenta a una posible inhabilitación, una medida que, de aplicarse, supondría un duro golpe a sus aspiraciones políticas tanto a nivel nacional como europeo. La líder de la ultraderecha ha negado sistemáticamente los cargos y podría recurrir la sentencia.
El fallo llega en un momento clave para AN, que aspira a capitalizar el descontento ciudadano de cara a los próximos comicios europeos
Un escándalo que salpica a toda la cúpula de AN
Entre los condenados se encuentran figuras destacadas del partido que ocuparon escaños en el Parlamento Europeo. La Fiscalía detalló que los contratos firmados con el Parlamento servían de «pantalla» para pagar a personal del partido que jamás pisó Bruselas ni Estrasburgo.
Este caso se suma a otros escándalos que han perseguido a Agrupación Nacional en los últimos años, reforzando la imagen de una estructura opaca y cuestionada por su gestión económica interna.