Los sindicatos se plantean una huelga indefinida en el almacén de Amazon en San Fernando de Henares después del “exito total” del paro de 48 horas. Desde CCOO advierten que empezarán a dar pasos para “intensificar las movilizaciones” en este sentido en el caso de que el gigante del comercio ‘online’ no acceda a “retomar las negociaciones del convenio colectivo”.
“Amazon tiene que sentarse a negociar y reconsiderar sus planteamientos y sus rebajas salariales y sociales hacia sus trabajadores”, afirma Douglas Harper, representante de este sindicato en el comité de empresa del centro logístico, el más grande de la compañía en España. “De no ser así y si no se producen avances en pocas fechas, CCOO planteará a los trabajadores y trabajadoras dar pasos hacia una huelga indefinida si no existe una respuesta por parte de la empresa”, añade.
Según las cifras de los sindicatos, la huelga convocada para el pasado miércoles 21 de marzo y el jueves 22 fue secundada por el 98% de la plantilla en la primera jornada y sumó también un “seguimiento masivo” en el segundo día. CCOO pide a Amazon escuchar “la atronadora respuesta que le ha dado su plantilla” con este “paro total”.
Los trabajadores, 1.100 empleados fijos y 900 temporales, han estallado ante la negativa del gigante del comercio ‘online’ de negociar la renovación del convenio propio del centro y su intención de instaurar el convenio provincial de Logística, lo que supondría “un recorte de los derechos laborales”. Según los representantes sindicales, el cambio supondría prácticamente una congelación de los sueldos y conllevaría la eliminación de una categoría profesional intermedia, por lo que quienes ocupaban estos cargos tendrán que bajar de rango automáticamente. Además, denuncia que con ello la compañía pretende reducir el precio de las horas extraordinarias, las nocturnas y las del fin de semana, así como rebajar la cobertura por una baja asociada al puesto de trabajo del 100% del salario durante 18 meses al 75%.
“Amazon no puede continuar con planteamientos esclavistas del siglo XIX para una empresa que se define como puntera e innovadora en el siglo XXI”, asegura Harper al respecto. “Es hora de que la empresa escuche la voz de su plantilla y deje de plantearse utilizar a su personal como fuente de financiación reduciendo sus salarios mientras la empresa engorda año a año sus beneficios en España”, señala en un comunicado del sindicato.
