El presidente de Bolivia, Evo Morales, ha acelerado su ofensiva para captar el voto indígena de cara a las próximas elecciones presidenciales del 6 de diciembre. Felipe Quispe, líder de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (Csutcb), ha asegurado a Americaeconomica.com que la entrega de la propiedad de más de 200.000 hectáreas de tierras a los indígenas es una táctica puramente electoralista.
Quispe ha indicado que ya era momento de que estas tierras fueran entregadas a sus verdaderos propietarios, porque siempre han pertenecido a los indígenas desde tiempos remotos. Aunque el líder indígena ha afirmado que esto ha ocurrido en estos momentos porque Evo necesita el voto de esta comunidad en las próximas elecciones.
El Gobierno de Evo Morales ha anulado las concesiones de explotación forestal en una zona del oriente de Bolivia y ha entregado la propiedad sobre más de 200.000 hectáreas de esas tierras a los indígenas de la etnia guaraya.
Quispe aseguró a este diario el pasado 4 de agosto que los movimientos indios del país han recuperado parte de su confianza en el presidente boliviano, tras la decisión del mandatario de presentar un decreto y un proyecto de ley que impulsa la formación de las autonomías indígenas.
El líder campesino ha indicado que estos son unos gestos de Evo hacía la comunidad indígena, aunque ha asegurado que aún queda mucho por hacer, como tener su propio presidente o lograr reconstruir su propia historia.
Este decreto da inicio al proceso de reconversión de unos 180 municipios en autonomías indígenas mediante un referendo que debería celebrarse el 6 de diciembre, junto con las elecciones generales.