El presidente de la Comisión de Defensa del Congreso, Edgar Núñez, ha manifestado que este presupuesto adicional permitirá a Perú contar con una capacidad militar operativa en condiciones apreciables para el 2010, aunque sin llegar a niveles óptimos en el contexto latinoamericano, haciendo clara referencia al alto gasto militar de países como Chile, Brasil o Venezuela.
Asimismo, el Consejo de Ministros ha aprobado un importe de casi 17 millones de euros destinados a gastos tributarios relacionados con la reparación de helicópteros.
El interés del Gobierno de Alan García de dotar a sus ejércitos de un presupuesto digno, ha llevado a su vicepresidente, Luis Giampietri, a presentar otro proyecto de ley que pretende que se destine el 5% del canon minero a las FFAA con fines de adquisiciones bélicas.
Este plan del Gobierno no es apoyado por todos lo peruanos. El opositor Partido Nacionalista y los gobiernos regionales afectados, consideran que el canon no se debe usar para financiar los ejércitos, habría que buscar nuevos tributos para este fin. Esta opinión es compartida incluso por congresistas del propio partido gobernante, que consideran que si se gravasen los ingresos mineros, el objetivo principal sería aliviar las condiciones de pobreza en las que viven los pueblos donde se encuentra la industria minera.
Muchos analistas ven en la actitud del Gobierno peruano una respuesta al desenfrenado rearme de Chile, el segundo país con mayor gasto militar de Latinoamérica. El que Perú se sume al rearme de sus vecinos, hace temer una escalada de armamentos sin precedentes en la región.
