El secretario general Iberoamericano, Enrique Iglesias, considera que las pequeñas y medianas empresas (Pymes) latinoamericanas, responsables de la mayor parte del empleo que se crea en la región, tienen una asignatura pendiente en el aumento de su productividad. Por éso considera que ha llegado la hora de que se planteen superar este reto. El encargado de la Secretaría General Iberoamericana asegura que este problema es causa de que se den salarios bajos.
Iglesias hizo estas declaracones durante la presentación, en la sede del Segib, del análisis estratégico para el desarrollo de la mPyme en Iberoamérica elaborado por la Fundación para el Análisis Estratégico y Desarrollo de la Pequeña y Mediana Empresa (Faedpyme) e impulsado por las Universidades de Cantabria, Murcia y la Politécnica de Cartagena. Se trata de una entidad creada con la finalidad la formación, investigación, innovación y asesoramiento sobre aspectos propios del ámbito de las mPyme.
Este informe, que ha sido presentado por Domingo García Pérez de Lema, catedrático de Economía Financiera y Contabilidad de la Universidad Politécnica de Cartagena, se ha elaborado para ayudar a las pequeñas empresas y a los distintos gobiernos, mediante un muestreo de 1.970 empresas españolas y latinoamericanas, a tomar decisiones empresariales basadas en datos fiables.
La petición de Enrique Iglesia parece estar dando sus frutos ya que este estudio muestra que un 70% de las micro, pequeñas y medianas empresas (mPyme) iberoamericanas ha implementado una política de innovación en alguna de sus áreas de investigación, lo que les vale como factor para adquirir una posición ventajosa del resto. Las compañías de mediano tamaño son las más proclives a hacerlo.
Otro de los datos a tener en cuenta es que actualmente son muchas las empresas que cuentan con un plan estratégico (61,4%) que les ayude a afrontar futuros problemas, aunque la mayoría de ellas lo han realizado a muy corto plazo (75%) lo que indica que no se ha desarrollado en profundidad.
El estudio apunta la necesidad de basar las estrategias competitivas no sólo en los costos, sino en la incorporación de nuevos factores relacionados con la diferenciación, la calidad, el diseño y el desarrollo de productos más elaborados y tecnológicos. A esto hay que añadir la importancia de la colaboración entre pequeñas empresas ya que todavía existe un 7,1% de mPymes que no presenta ningún tipo de estrategia de cooperación.
Como factor negativo hay que añadir que el 29% de las mPyme iberoamericanas tiene previsto reducir el número de puestos de trabajo durante el año 2010. De entre los tres tipos de negocio son la microempresas (con menos de diez empleados) la que se van a ver menos afectadas en la caída del empleo. En cuanto a las ventas el 40,7% de las de las pequeñas empresas consultadas prevé que durante este año estas, caerán lo que influirá también en el empleo.
Para las Universidades encargadas de realizar el informe son las empresas jóvenes, no familiares, profesionalizadas y que cuentan con un buen plan estratégico las más preparadas para afrontar la crisis.
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