Esta semana las precipitaciones fueron abundantes en la vertiente Atlántica y afectaron considerablemente a la vertiente Mediterránea. Así, la mayor cantidad se ha recogido en Pontevedra, con 110,4 litros por metro cuadrado.
Por ámbitos, la reserva se encuentra al 65,8 por ciento en Cantábrico Oriental; al 78,8 por ciento en Cantábrico Occidental; al 78,8 por ciento en Miño-Sil; al 92 por ciento en Galicia Costa; al 61,9 por ciento en las cuencas internas del País Vasco; al 55,5 por ciento, el Duero; al 63,7 por ciento, el Tajo; al 83,4 por ciento, en Tinto, Odiel y Piedras y al 57,6 por ciento, el Júcar.
Sin embargo, se mantienen por debajo de la mitad de su capacidad los embalses de la cuenca del Guadiana, que están al 33,4 por ciento; Guadalete-Barbate, al 29,7 por ciento; Guadalquivir, que está al 24,4; la cuenca Mediterránea Andaluza, que está al 38,1; Segura al 33,9 por ciento; Ebro, al 44,4 por ciento y las cuencas internas de Cataluña, que están al 31 por ciento.
Pese a los incrementos acumulados en las últimas semanas, los embalses se encuentran en esta segunda semana del año un 14,06 por ciento por debajo de la media del decenio. Sin embargo, ya superan en 1.790 hectómetros cúbicos el volumen de agua embalsada de hace un año, lo que representa un 7,18 por ciento más.
Para encontrar una cifra inferior de agua embalsada a la actual en la segunda semana del año hay que remontarse a 2018, cuando la reserva estaba al 40,37 por ciento, y hasta 2008, cuando la situación era similar a la actual, ya que entonces los embalses estaban al 41,87 por ciento, y hasta 19993, cuando se encontraban al 41,93 por ciento.
