El impacto de la Semana Santa, que este año coincidió con abril, y el efecto base del repunte de marzo, explican esta contracción en la actividad industrial. Sin embargo, si se corrigen los efectos estacionales y de calendario, la caída se modera e incluso se mantiene un ligero crecimiento interanual.
El impacto de la Semana Santa y la comparativa con el mes de marzo agravan la caída interanual de la producción industrial
La Semana Santa acentúa la caída de la producción industrial
El desplome de la producción industrial en abril rompe la racha de repuntes registrada en marzo, cuando el IPI creció un 8,5%. Esta fuerte caída, que supone 14,2 puntos menos que la del mes anterior, se explica en gran parte por el efecto calendario de la Semana Santa, que en 2024 tuvo lugar en marzo y en 2025 en abril. La variación negativa es la mayor desde marzo de 2024, cuando la industria se contrajo un 12,1%.
En términos ajustados, la industria sigue creciendo, aunque de forma más lenta, lo que apunta a una cierta estabilidad pese a la volatilidad estacional
Crecimiento moderado tras corregir efectos estacionales
Pese a la magnitud de la caída bruta, las cifras corregidas por estacionalidad y calendario muestran un crecimiento interanual del 0,6% en abril, aunque tres décimas menos que el mes anterior. Esto refleja que, una vez eliminados los efectos puntuales del calendario, la industria española logró mantener un tono moderadamente expansivo.
En términos mensuales (abril sobre marzo), la serie ajustada refleja un descenso del 0,8%, cortando la racha de dos meses consecutivos de avances.