El mantenimiento de la tasa en el 3,8% responde a la combinación de una moderación en bienes de consumo y un avance aún fuerte en servicios básicos. Los alimentos y bebidas no alcohólicas se encarecieron un 4,5%, seis décimas menos que en agosto, mientras que los suministros para el hogar subieron un 7,3%.
La inflación se mantiene en el 3,8% por tercer mes consecutivo y marca el mayor encarecimiento desde enero de 2024
La educación registró una subida del 7,2% y el transporte un incremento del 3,8%, frente al 2,4% del mes anterior. El ocio y la cultura se encarecieron un 2,7%, lo que refleja una cierta moderación del gasto en actividades recreativas.
| Categoría | Variación interanual septiembre |
|---|---|
| Alimentos y bebidas no alcohólicas | 4,5% |
| Educación | 7,2% |
| Transporte | 3,8% |
| Suministros para el hogar | 7,3% |
| Ocio y cultura | 2,7% |
| Bienes (conjunto) | 2,8% |
| Servicios | 4,7% |
Los bienes en conjunto moderaron su subida al 2,8%, mientras que los servicios mantuvieron un incremento del 4,7%, lo que refleja que la presión sobre los precios continúa concentrada en el sector doméstico.
El Banco de Inglaterra mantiene la cautela ante la persistencia inflacionista
El nivel actual de precios duplica el objetivo del 2% del Banco de Inglaterra, lo que dificulta cualquier relajación monetaria a corto plazo. La entidad ha optado por mantener el tipo de referencia en el 4%, consciente de que un recorte prematuro podría reactivar el consumo y alimentar nuevas subidas.
La inflación de servicios y el aumento de los costes laborales frenan las expectativas de bajadas de tipos en Reino Unido
El gobernador Andrew Bailey ha reiterado en sus comparecencias que la estabilidad de precios sigue siendo prioritaria y que la institución solo actuará cuando se consolide una tendencia clara de desaceleración en el IPC subyacente.
Efectos sobre los hogares y perspectivas económicas
El mantenimiento de los precios afecta directamente al poder adquisitivo de las familias, que todavía no han recuperado el nivel previo a la crisis inflacionaria. Aunque los alimentos crecen menos que hace un año, los costes de vivienda, energía y servicios básicos siguen absorbiendo una parte importante de los ingresos.
Las familias británicas continúan sufriendo el impacto de una inflación que erosiona el poder de compra y limita el ahorro
Los analistas esperan que la inflación se mantenga por encima del 3% durante los próximos meses y no alcance el umbral del 2% hasta mediados de 2026. La evolución de los precios de la energía y la moderación salarial serán determinantes para alcanzar ese objetivo.
La estabilidad en el 3,8% confirma que la desinflación en Reino Unido avanza con lentitud. Mientras los servicios mantengan la presión, el Banco de Inglaterra seguirá priorizando la contención frente al crecimiento, en una economía que aún busca recuperar el equilibrio tras dos años de tensión en los precios.







