El entonces presidente de la FIFA Joseph Blatter (D) habla con Michel Platini, en ejercicio de la presidencia de la UEFA, durante un congreso de la FIFA celebrado el 11 de junio de 2014 en Sao Paulo
La FIFA anunció este lunes haber acudido a la justicia suiza para obtener el reembolso de los 2 millones de francos suizos (1,84 millones de euros) pagados de «manera indebida» por el expresidente de la instancia Joseph Blatter a Michel Platini, que fue suspendido cuatro años por recibir esta cantidad.
La instancia sigue de esta forma una recomendación emitida por su comisión de gobernanza, el 25 de noviembre, cuya existencia desveló la AFP el miércoles.
Esta transferencia le valió a Blatter y Platini una suspensión de seis y cuatro años respectivamente de toda actividad vinculada con el fútbol. La suspensión del antiguo capitán de la selección francesa terminó en octubre.
Por ese pago considerado «desleal», la justicia suiza abrió en septiembre de 2015 un proceso penal contra Blatter, en el origen de este pago en 2011 a Platini, sin contrato escrito, por un trabajo de asesoría en 2002.
Según la resolución tomada por la comisión de gobernanza de la FIFA la instancia acude a la justicia suiza «para obtener el reembolso del dinero transferido de manera ilegal por el expresidente de la FIFA al exvicepresidente de la FIFA». Tenía hasta el 31 de diciembre para presentar su demanda.
La acción judicial se dirige solidariamente contra Blatter y contra Platini y busca recuperar la suma de 2 millones de francos suizos «acompañados de intereses» pero también las multas a las que fueron condenados ambos dirigentes, así como las tasas del proceso que, según el documento, nunca pagaron.
«Incluso el Tribunal Federal Suizo», que había confirmado la suspensión de cuatro años de Platini, «confirmó que este regalo de dos millones de francos suizos debía ser considerado como un pago indebido», añadió la FIFA en su comunicado.
Preguntado el miércoles por la AFP, el abogado de Platini Vincent Solari señaló que el «único objetivo es seguir intentando desacreditar» a su cliente.
El enfoque es incluso «de hostigamiento», en opinión del abogado suizo.
Para Blatter, contactado también por teléfono por la AFP, «es un caso cerrado, no veo cómo la FIFA puede recurrir a la justicia». «Eso pasó por las cuentas de la FIFA, fue validado por la Comisión de Finanzas y durante el Congreso de 2011», añadió.
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