Antes del primer ladillo, se ofrece un texto introductorio que contextualiza la noticia y engancha al lector, destacando la preocupación de la Fed ante la incertidumbre generada por las decisiones arancelarias y su impacto directo en el crecimiento de la economía estadounidense.
La desaceleración de la economía preocupa a la Fed, que advierte de una perspectiva incierta y pesimista
Preocupación en los distritos de la Fed por el retroceso económico
El informe de la Fed destaca un retroceso «ligero» en el comportamiento de la economía estadounidense. En la mitad de los distritos analizados, se detectaron caídas de niveles «leves a moderados», lo que muestra una escena desigual en la actividad productiva.
La institución subraya que «todos los distritos reportaron niveles elevados de incertidumbre económica y política, que han llevado a la indecisión y a un enfoque cauteloso de las decisiones empresariales y domésticas». Este clima de incertidumbre, derivado de la guerra arancelaria, afecta directamente a las inversiones y al consumo.
Los precios siguen subiendo pese a la desaceleración
A pesar de la desaceleración, los precios continúan al alza, aunque a un ritmo moderado. Según el análisis de la Fed, algunos distritos registran un aumento de la inflación como consecuencia de los aranceles, lo que repercute en el precio final para los consumidores.
La subida de aranceles a productos clave como el acero y el aluminio intensifica las tensiones comerciales, dificultando los acuerdos internacionales
La subida de los gravámenes sobre el acero y el aluminio, que han pasado del 25% al 50%, también contribuye a esta tendencia inflacionaria. Esta medida golpea especialmente a Canadá, principal suministrador de estos metales a EEUU, así como a grandes productores como México, Brasil, Corea del Sur y Vietnam.
Complicaciones para las negociaciones con China y la UE
La guerra arancelaria no solo impacta en la actividad doméstica, sino que también complica las negociaciones comerciales con China y la Unión Europea. Las perspectivas de la Fed siguen siendo «ligeramente pesimistas e inciertas», sin cambios respecto al informe anterior.