En cifras anualizadas, el retroceso fue del -0,5% frente al -0,3% inicial y al -0,2% de la segunda lectura. Estos datos contrastan con la expansión del 2,4% observada a finales de 2024. Así, se estaría ante la primera caída del PIB estadounidense desde el primer trimestre de 2022, cuando bajó un 1% en datos anualizados, recoge Europa Press.
“La disminución del PIB real en el primer trimestre se debió, principalmente, al aumento de las importaciones, que se restan al cálculo del PIB, y a una disminución del gasto público. Estas dinámicas fueron parcialmente compensadas por las mejoras en la inversión y el consumo de las familias”, ha explicado el documento.
En este sentido, la revisión acometida se fundamenta en un empeoramiento del gasto de los hogares y de las exportaciones que no pudo ser contrarrestado por unas menores importaciones de lo informado en un primer momento.