El mercado alimentario vive una escalada que no da tregua a los hogares. Los últimos datos del Observatorio de Precios de la OCU revelan que los alimentos son un 36% más caros que hace tres años, lo que obliga a las familias a ajustar cada vez más sus compras. Dentro de la cesta, la carne y la charcutería se consolidan como los grandes focos de presión.
La ternera lidera los incrementos
En julio, la partida de carne y charcutería se encareció un 1,42% respecto al mes anterior y acumula un alza del 12% interanual. Los productos de ternera son los que más suben: la carne picada se dispara un 25%, el estofado un 24% y el entrecot un 16%. También sube el conejo (11%) y la pechuga de pollo (6%), mientras que las salchichas tipo Frankfurt bajan un 3%.
Los precios muestran que el impacto no es homogéneo y que los cortes de mayor calidad son los más afectados, encareciendo la compra para miles de familias.
La carne picada sube un 25% y el estofado un 24%, situando a la ternera como el producto más tensionado en el último año
Comparativa por categorías en la cesta de la compra
El informe detalla cómo se comportaron otras partidas en los últimos doce meses. Las frutas y verduras subieron un 4%, los lácteos un 2%, el pescado un 1% y los productos de droguería e higiene un 0,5%. En el lado contrario, los productos de despensa bajaron un 6% y las bebidas un 1%.
Categoría | Variación interanual |
---|---|
Carne y charcutería | +12% |
Frutas y verduras | +4% |
Lácteos | +2% |
Pescado | +1% |
Droguería e higiene | +0,5% |
Productos de despensa | -6% |
Bebidas | -1% |
</p><blockquote data-start=»2172″ data-end=»2295″><p data-start=»2174″ data-end=»2295″>Los alimentos en conjunto son ya un 36% más caros que hace tres años, según la OCU</p></blockquote><p data-start=»2297″ data-end=»2640″>
La petición de la OCU: IVA reducido para carne y pescado
Ante esta situación, la organización reclama recuperar la bajada del IVA aplicada en 2023 y ampliar el tipo reducido del 4% a la carne y el pescado, que hoy tributan al 10%. La OCU argumenta que ambos son alimentos básicos en la dieta y que su encarecimiento impacta de forma desproporcionada en los hogares con menos recursos.
La OCU reclama que carne y pescado tributen al 4% de IVA para aliviar la cesta de la compra
Perspectivas y recomendaciones
El encarecimiento constante de la alimentación refleja tensiones estructurales: costes de producción, energía, logística y fiscalidad. Todo apunta a que, sin medidas adicionales, los precios seguirán presionando a corto plazo.
Los consumidores pueden amortiguar parte del impacto comparando precios entre cadenas de supermercados y optando por marcas blancas, aunque las diferencias se han estrechado en los últimos meses.