El proyecto propone “una nueva visión del conjunto monumental y su entorno, dando pie a una estrategia que busca la discreción ante el paisaje, sin dudar ante la transformación clara del entorno”. Con este proyecto se facilita el encuentro y el diálogo en un contexto que da mayor protagonismo a la naturaleza.
La intervención se ordena en torno a dos elementos principales: una nueva plataforma y un patio que la atraviesa que resuelven de manera clara y rotunda los condicionantes actuales y el programa propuesto.
El proyecto ganador se ha elegido entre los diez finalistas escogidos durante la primera reunión del jurado, en la que se vieron 34 proyectos. Este concurso, convocado el pasado mes de abril, constituye un hito en el compromiso del Gobierno con la memoria democrática y la resignificación del Valle de Cuelgamuros. Su objetivo es transformar este conjunto monumental y su entorno inmediato en un lugar reflexión y diálogo.









