El crecimiento de la actividad industrial en China cobró impulso en marzo, según los últimos datos del índice de gestores de compras (PMI) publicados por la Oficina Nacional de Estadística. La lectura se situó en 50,5 puntos, frente a los 50,2 registrados en febrero, lo que indica el nivel más alto de expansión desde marzo de 2024. Este dato refuerza la percepción de una mejora moderada del sector, pese al contexto geopolítico adverso.
El PMI no manufacturero, que incluye los sectores de servicios y construcción, también experimentó un avance al pasar de 50,4 a 50,8 puntos, reflejando una recuperación generalizada de la economía china.
La demanda interna y las exportaciones anticipadas sostienen el repunte
Uno de los principales motores del crecimiento manufacturero ha sido el incremento en el índice de nuevos pedidos, que alcanzó los 51,8 puntos, frente a los 51,1 del mes anterior. Este dato sugiere una mejora continua de la demanda del mercado, tanto nacional como internacional.
Julian Evans-Pritchard, economista principal para China de Capital Economics, apunta que parte del crecimiento puede deberse a que los importadores estadounidenses adelantaron sus compras ante el temor a nuevos aranceles. Además, señala que el repunte también podría haber estado influido por medidas de estímulo fiscal implementadas por el Gobierno chino.ç
“El presupuesto permite intensificar aún más el apoyo fiscal en los próximos meses. Sin embargo, los aranceles estadounidenses comenzarán a afectar las exportaciones en poco tiempo”, advierte el experto
Las grandes empresas lideran, pero las pequeñas siguen en contracción
Por tamaño empresarial, las grandes empresas mantuvieron una expansión con un PMI de 51,2, aunque por debajo de los 52,5 de febrero. En cambio, las medianas y pequeñas empresas continuaron en terreno contractivo, con 49,9 y 49,6 puntos respectivamente, lo que refleja las dificultades que siguen enfrentando los negocios más vulnerables.
Moderación de precios y perspectivas limitadas
En el apartado de precios, el índice de precios de los insumos subió ligeramente a 48,6 puntos, indicando una moderación en la caída de costes. No obstante, el índice de precios de venta cayó a 46,7 puntos, lo que sugiere que los fabricantes continúan bajando precios para estimular la demanda.
Por su parte, el PMI compuesto, que agrega los datos de manufactura y servicios, se situó en 51,4 puntos, una mejora respecto a los 51,1 del mes anterior, reforzando la señal de estabilización en la economía china.
La amenaza arancelaria de EEUU pone en duda la recuperación
Pese a los datos alentadores, Evans-Pritchard advierte que el impulso económico más allá del sector manufacturero es todavía «débil». A su juicio, el apoyo fiscal podría sostener la actividad a corto plazo, pero los nuevos aranceles de EEUU, que podrían intensificarse esta misma semana, suponen una amenaza clara para el comercio exterior chino.