Imagen del hemiciclo del Congreso. (Foto: Congreso)
Todas las miradas estaban puestas este jueves en los diputados y las diputadas de Junts. Su voto era clave para que la enmienda de los populares para alargar la vida de las nucleares de Almaraz, Asco I y Cofrentes saliera adelante. Al final, el partido de Carles Puigdemont se ha abstenido, decantando la balanza del lado del Gobierno.
La votación se ha saldado con 171 ‘síes’, 172 votos en contra y siete abstenciones, las relativas a los representantes de la formación catalana.
Esto se ha producido una semana después de que Junts confirmara su ruptura con Pedro Sánchez y su Ejecutivo. La portavoz de este partido en la Cámara baja, Míriam Nogueras, anunció el pasado 6 de noviembre el veto a todas las leyes del PSOE y Sumar. Un rechazo que no afectaba ni esta norma ni a la Ley de Atención a la Clientela, que ha salido adelante gracias al apoyo de los de Puigdemont.
El calendario para el cierre de las centrales nucleares se mantiene como hasta ahora y el foco se centra en el informe del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) después de que Iberdrola, Endesa y Naturgy hayan formalizado su petición para extender la vida útil de Almaraz hasta 2030.
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