La postura de Teherán se mantiene firme pese a los intentos de la administración estadounidense por reanudar el diálogo sobre el programa nuclear iraní.
Irán rechaza presiones y amenazas
Durante una entrevista con la agencia AFP, Araghchi reiteró que Irán no cederá ante las amenazas ni el endurecimiento de sanciones. Sus declaraciones se producen después de que el expresidente de EEUU, Donald Trump, informara sobre el envío de una carta al líder supremo iraní, Ali Jameneí, en la que expresaba su disposición a negociar un nuevo acuerdo nuclear.
Sin embargo, la misión de Irán en la Organización de las Naciones Unidas (ONU) afirmó que hasta el momento no ha recibido dicho documento.
El acuerdo nuclear y su colapso bajo la administración Trump
El actual estancamiento en las negociaciones es consecuencia del colapso del Plan de Acción Integral Conjunto (PAIC), firmado en 2015 entre Irán y seis potencias mundiales: EEUU, Rusia, el Reino Unido, China, Francia y Alemania.
Este pacto estableció restricciones al programa nuclear iraní a cambio del levantamiento de sanciones económicas, con el objetivo de evitar una posible dimensión militar del desarrollo nuclear en Irán.
No obstante, en mayo de 2018, Trump retiró unilateralmente a EEUU del acuerdo, alegando que Irán continuaba con su programa nuclear con fines militares, una acusación que nunca fue confirmada. A partir de entonces, Washington reimpuso sanciones económicas y aplicó una política de máxima presión sobre Teherán.
En respuesta, Irán comenzó en 2019 a reducir gradualmente sus compromisos dentro del PAIC, aumentando el nivel de enriquecimiento de uranio y reanudando investigaciones nucleares previamente limitadas por el acuerdo.
Negociaciones en Viena: un proceso paralizado
En abril de 2021, los países firmantes del PAIC, junto con EEUU, iniciaron en Viena negociaciones para revivir el acuerdo. Sin embargo, en marzo de 2022, las conversaciones se estancaron y desde entonces no han logrado retomarse.
A principios de febrero de este año, Trump declaró su intención de alcanzar un acuerdo nuclear pacífico y verificable con Irán, aunque sin ofrecer detalles sobre las condiciones o los posibles cambios en la política estadounidense hacia Teherán.
Perspectivas inciertas para un nuevo pacto
El escenario actual refleja una profunda desconfianza entre ambos países, lo que complica cualquier posibilidad de un acuerdo inmediato. Mientras Washington insiste en imponer condiciones más estrictas, Irán mantiene su postura de no negociar bajo presión y exige el levantamiento de sanciones como requisito previo para cualquier diálogo.