Ségolène Royal, que ocupará el Ministerio de Energía, es la madre de sus cuatro hijos. Michel Sapin, que ocupará la cartera de Finanzas, es un buen amigo personal, igual que el nuevo portavoz del Ejecutivo, Stéphane Le Foll. François Hollande parece haber recibido el mensaje de la ciudadanía francesa, que el pasado domingo demostró al mandatario en las elecciones municipales que no está nada contenta con su gestión. El líder socialista ha remodelado en apenas tres días la mayor parte de su Gobierno. La pregunta que surge es: ¿en qué dirección?
Según recogen los corresponsales de la BBC destacados en Francia, el nuevo primer ministro de Hollande, Manuel Valls, se sitúa en el ala más liberal del Partido Socialista. Y, sin embargo, en los cambios que ha presentado destaca el nombramiento de Arnaud Montebourg como ministro de Economía. Montebourg es conocido en Francia por sus posturas proteccionistas y antiglobalización, lo que le convierte en un enemigo declarado de una Comisión Europea que ha aprovechado esta semana para recordar a París que debe mantener su política de recortes.
Valls también ha decidido otorgar carteras ministeriales a Benoît Hamon y Sylvia Pinel. Esta última pertenece al partido radical de la izquierda y gestionará la logística del territorio nacional, mientras que Hamon, otro declarado miembro del ala izquierda del Partido Socialista, se encargará de Educación. Por su parte, Laurent Fabius se mantiene en Exteriores, Jean Yves Le Drian en Defensa, Christiane Taubira en Justicia y Aurelie Filippetti en Cultura.
Los medios locales se preguntan cuántas de estas opciones han salido de Valls y cuántas de Hollande. En torno a las que no parece haber ninguna duda son las elecciones de Ségolène Royal como ministra de Energía y Desarrollo Sostenible y Michel Sapin como ministro de Finanzas en sustitución del controvertido Pierre Moscovici. Royal, que fue sorprendentemente apartada del Gobierno que formó Hollande en primer lugar, es la mujer de sus cuatro hijos y Sapin, que deja así el Ministerio de Trabajo, es un amigo muy cercano del mandatario.
Además, a la función de portavoz del Ejecutivo ha sido catapultado el titular de Agricultura, Stéphane Le Foll, también amigo y uno de los más cercanos colaboradores de Hollande. Le Foll sustituye a la titular de los Derechos de la Mujer, Najat Vallaud-Belkacem, que mantiene su ministerio.
No son pocos los analistas citados tanto por medios locales como por medios extranjeros informando desde el terreno que señalan la cercanía personal que mantienen con el presidente varios de estos nombres. En las ya mencionadas elecciones municipales Hollande observó cómo su partido salía severamente derrotado frente al conservador UMP en unos comicios que registraron una abstención del 39%; una cifra récord. Además, la popularidad del líder socialista también se encuentra en cifras récord pero por lo bajo.
Según informa la BBC, uno de los principales objetivos del nuevo Gobierno es asegurar a Bruselas que cumplirá con el objetivo del déficit. Sin ir más lejos, el propio lunes Valls fue asignado la misión de aprobar reformas benévolas en materia fiscal con el mundo empresarial confiando en combatir, de este modo, el paro.