El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha propuesto en un reciente informe técnico la creación de una prestación por desempleo común en los países de la zona euro. Todo un saludo a la victoria de Angela Merkel en las elecciones alemanas del pasado domingo.
Una victoria amarga, pues la canciller, a pesar de rozar la mayoría con 311 de los 630 diputados del Parlamento alemán, no ha conseguido los escaños necesarios para gobernar en solitario, por lo que tendrá que pactar.
El mayor problema para Merkel es que las dos formaciones partidarias de la austeridad, los hasta ahora aliados liberales del FDP y los euroescépticos, no han logrado entrar en el Parlamento debido a la norma alemana, que deja fuera a los partidos que no cuentan con un apoyo de al menos el 5%.
Así, la canciller alemana se ve obligada a pactar con uno de los tres partidos contrarios a sus medidas de ahorro: SPD, que se ha hecho con 192 escaños; La Izquierda, que ha logrado 64 diputados; y Los Verdes, que han obtenido 63 escaños. Estas dos últimas formaciones han perdido escaños con respecto a las elecciones de 2009, una caída que se ha visto compensada por los diputados ganados por los socialdemócratas.
Precisamente, los socialdemócratas del SPD son, ante este resultado, quienes tienen más posibilidades de asociarse con Merkel. La Izquierda es el partido más crítico con la austeridad de Merkel y su Unión Demócrata Cristiana (CDU) y Los Verdes tampoco son una opción, pues su líder Trittin, defendió en un pasado la pederastia.
En medio de esta situación, el SPD, que sabe que tiene a la canciller acorralada, ya ha anunciado al CDU sus exigencias si quieren formar partido y entre ellas se incluye un cambio de rumbo en las políticas europeas. Esta exigencia del fin de las políticas de austeridad ha recibido hoy el respaldo de los técnicos del FMI.
La recomendación del organismo internacional supone, por tanto, el segundo ‘marcaje’ a la canciller alemana en favor de un mayor apoyo a los países del sur de Europa. Merkel, como mandataria de la mayor potencia europea, siempre se ha mostrado reticente a que Alemania tenga que pagar los ‘platos rotos’ de las naciones de la Unión Europea (UE) con problemas económicos, una postura que parece que tendrá que variar si quiere una legislatura al lado de los socialdemócratas.
El SPD y el FMI se han mostrado así en consonancia en su idea: dejarse de austeridad y ayudar a los países europeos con problemas. Los socialdemócratas alemanes han propuesto la creación una “pensión solidaria”, mientras que el organismo internacional ha recomendado una prestación por desempleo común en la Eurozona.
Este fondo común estaría destinado a pagar las ayudas por desempleo en los países de la moneda única en los que las tasas de paro han alcanzado cifras preocupantes debido a la crisis. De esta manera, la financiación para hacer frente a la difícil situación económica de los países con problemas procedería de los presupuestos soberanos de las distintas naciones de la Eurozona.
“Avanzar hacia un mínimo nivel de protección frente al paro a nivel de la eurozona proporcionaría una garantía natural frente a los riesgos de ingresos a nivel individual en toda la unión”, señala el FMI en su informe.
De acuerdo a esta idea, el organismo ha querido destacar el caso de otras federaciones y bloques, en los que las iniciativas contra el desempleo están muy centralizadas.
“Un esquema común requeriría un grado mínimo de armonización en la fiscalidad del empleo, así como potencialmente en las pensiones”, han añadido los técnicos del FMI en su informa.
La propuesta se incluye dentro de las iniciativas planteadas por el organismo para una mayor integración fiscal. Su objetivo es que los países con mayor potencia económica ayuden a los más débiles en la medida en la que éstos lo necesiten y no de manera continua, según ha querido destacar la institución internacional.
