Los datos del PIB comunicados por las autoridades helenas no permiten profundizar demasiado en lo que muestran debido a la incapacidad del instituto de estadística (Elstat) de ajustarse a los criterios establecidos en la Unión Europea por el Reglamento número 223 del 2009.
Pese a que en el artículo 12 de la normativa se establece que «para garantizar la calidad de los resultados, las estadísticas europeas se desarrollarán, elaborarán y difundirán con arreglo a normas uniformes y métodos armonizados», las autoridades griegas han decidido calcular solo las tasas anuales, sin ninguna división en trimestres.
Los números de Atenas, además, no tienen en cuenta la estacionalidad, es decir, las variaciones periódicas y predecibles en los datos debidas a dinámicas propias solo de algunas temporadas del año. Ellos mismos lo aclaran en sus propias publicaciones al decir que debido a las últimas turbulencias financieras que atraviesa el país, estos datos no serían “satisfactorios”.
