El Gobierno portugués considera que su mercado laboral aún es demasiado rígido en los tiempos que corren. Por ese motivo, quiere reducir el valor medio de las indemnizaciones pagadas a los trabajadores en caso de despido.
Según han informado los medios locales, recién entrada en vigor la reforma laboral que contiene la alteración del pago de 30 para 20 días por año trabajado, a partir de noviembre se espera reducir esa cifra a la mitad o a menos de un tercio.
Las autoridades lusas se amparan en un estudio elaborado por el Ministerio de Economía en el que se puede observar cómo el valor medio de las compensaciones en la Unión Europea (UE) es de 6 a 10 días por cada año de antigüedad y de 7 a 13 en la zona del euro.
La propuesta parece estar generando mucha polémica. Hace unos meses se aprobó en Portugal una reforma laboral según la cual los contratos posteriores a noviembre de 2011 tienen derecho a 20 días de salario base por cada año trabajado sin límite mínimo.
Anteriores a dicha fecha, los trabajadores mantienen el derecho a una compensación por despido colectivo y 30 días de salario base por año trabajado con un mínimo de tres meses y sin límite máximo.
