Warren Buffett, el millonario estadounidense más conocido como el Oráculo de Omaha y principal accionista de la agencia de calificación Moody’s, ha recomendado a los inversores en una carta reproducida por la revista Fortune que se olviden de los bonos y apuesten por la Bolsa. También ha argumentado que el oro carece de atractivo.
En el artículo Buffett sostiene que los bonos «deberían venir con una advertencia» ahora mismo, porque los tipos de interés no son lo suficientemente altos para anular la inflación y los impuestos. Y aunque los bonos, y otras inversiones basadas en las divisas, tienen la reputación de ser seguros, «en verdad están entre los activos más peligrosos».
Buffett reconoce que su fondo de inversión, Berkshire Hathaway, tiene en cartera bonos del Tesoro de EEUU, pero sólo para asegurarse de que la empresa tiene un acceso rápido a la liquidez si le hiciera falta de forma urgente. «Durante el último siglo estos instrumentos financieros han logrado la destrucción del poder de compra de los inversores en muchos países, a pesar de pagar un interés regular», asegura el magnate.
En cuanto a los activos que han dejado de ser productivos, especialmente el oro, Buffett sostiene que «sus tenedores no está inspirados por lo que el activo puede producir, ya que éste se mantendrá muerto para siempre, sino por la creencia de que otros lo desearán todavía más ávidamente en el futuro». Y, aunque una subida de precios puede animar incluso a los escépticos a sumarse a la tendencia, «las burbujas que se han hecho lo suficientemente grandes inevitablemente estallan».
