La compañía de Bill Gates, Microsoft, podría contar con un plan para vender su deuda y recomprar acciones durante este ejercicio económico. El objetivo que se persigue es pagar dividendos y devolver el dinero invertido a sus accionistas. La empresa opina que hay demasiadas de sus acciones en el extranjero.
Microsoft probablemente podría emitir hasta 6.000 millones dólares más de nueva deuda sin poner en riesgo su calificación de AAA, la máxima adjudicada por los rating. La oferta podría llegar antes del final del año fiscal de la compañía, según fuentes cercanas.
El consejero delegado de la compañía, Steve Ballmer, se encuentra bajo presión para devolver a los inversores 36.800 millones de euros
Heather Bellini, un analista de ISI Group en Nueva York, alega que se espera una oferta de deuda de hasta 10.000 millones de dólares a corto plazo . Esa cifra es probablemente demasiado alta, según una persona familiarizada con los planes de Microsoft.
Microsoft no es la única que afronta esta situación, ya que otras compañías como Apple cuentan con el mismo problema en cuanto a las «compromisos» que tienen con sus inversores.
La emisión de Microsoft sigue a la de Home Depot y a la de Dell, que lanzaron sendas emisiones este mes.
