El banco hipotecario Northern Rock Asset Management, una de las dos entidades resultantes de la división en enero del nacionalizado Northern Rock, registró durante el primer semestre del año un beneficio atribuido de 358,8 millones de libras (433,2 millones de euros).
No obstante, en los primeros resultados que publica el banco desde que se escindiera en dos empresas independientes a comienzos de este año (Northern Rock PLC, encargada de la banca minorista, y la otra, Northern Rock Asset Management, responsable de la banca hipotecaria), se ha conocido que la otra pata del banco, Northern Rock PLC, registró pérdidas de 140 millones de libras (169 millones de euros).
Northern fue intervenido por el Gobierno británico el 22 de febrero de 2008, por la incapacidad de responder a sus ahorradores y ante su riesgo de quiebra. El Ejecutivo decidió nacionalizarlo después de que éste entrara en crisis por las hipotecas de alto riesgo estadounidenses (subprime) y después de rechazar dos ofertas de compra del grupo Virgin y de un grupo de gestores del propio Northern Rock por considerar que no eran ventajosas para los contribuyentes.
