La secretaria de Comercio, Penny Pritzker, ha detallado que la nueva normativa está pensada especialmente para “apoyar al emergente sector privado” de la Isla. EEUU ha anunciado una nueva batería de medidas en su progresivo levantamiento del bloqueo a Cuba. Sin embargo, el turismo estadounidense en la mayor de las Antillas seguirá prohibido por las autoridades de Washington. El deshielo va en esta ocasión dirigido a que las compañías norteamericanas tengan más facilidad de negocio en la isla.
El Departamento del Tesoro ha sido el encargado de revisar la lista de limitaciones a los intercambios empresariales con EEUU, que ya había sido actualizada el pasado 16 de enero. La medida se ha anunciado como un paso más en “la nueva dirección para las relaciones con Cuba”, según ha explicado su responsable Jacob J. Lew.
Aunque se relajan “aún más las sanciones sobre los viajes”, el turismo sigue prohibido y tan solo se permite de momento el viaje bajo circunstancias concretas, especialmente, para ciudadanos con parientes en Cuba. También se ha facilitado el intercambio de telecomunicación, transacciones comerciales y el envío de remesas.
Por su parte, la secretaria de Comercio, Penny Pritzker, ha detallado que la nueva normativa está pensada especialmente para “apoyar al emergente sector privado” de la Isla y avanzar en los objetivos políticos de la administración Obama. “Una relación más fuerte entre Estados Unidos y Cuba tiene el potencial de crear oportunidades económicas para los dos, estadounidenses y cubanos”, ha defendido.







