India ha registrado este viernes por primera vez más de 20.000 casos de COVID-19 en un solo día, lo que eleva el balance total de contagiados por encima de 625.000 y mantiene al país asiático como el cuarto del mundo más afectado por la pandemia, cada vez más cerca de los datos de Rusia.
El Ministerio de Sanidad indio ha informado de 20.903 casos más, hasta un total de 625.544. También ha elevado la cifra de fallecidos a 18.213, 379 más que el jueves, mientras que casi 380.000 personas han superado la enfermedad, según la cadena de televisión NDTV.
La agencia india del medicamento ha autorizado este viernes el ensayo en humanos de una segunda posible vacuna contra la COVID-19, en un momento en el que el país encadena las peores tasas de contagio desde el inicio de la pandemia. India tiene unos 1.300 millones de habitantes y es el segundo país más poblado del mundo.
El primer ministro, Narendra Modi, criticó el martes la «negligencia» de parte de la ciudadanía e instó a ser «más cuidadosos», por ejemplo llevando mascarillas o guardando distancias. El mandatario ha defendido en estas últimas semanas que la emergencia sanitaria puede ser también una «oportunidad» para avanzar hacia una menor dependencia de otros países.
