La compañía ha declarado cerrada y ejecutada la reducción de capital social mediante la amortización de 200.561.000 acciones propias tras el cierre de mercado de este lunes, 30 de junio de 2025.
En concreto, según Europa Press, el capital social de Iberdrola ha quedado reducido en 150.420.750 euros, fijándose el nuevo capital en 4.680.000.000 euros, que corresponden a 6.240.000.000 acciones en circulación tras la operación.
La reducción de capital se ha llevado a cabo con la finalidad de amortizar acciones propias para coadyuvar a la política de remuneración del accionista, sin que haya implicado devolución de aportaciones, dado que Iberdrola era titular de las acciones amortizadas.
La operación se ha realizado con cargo a reservas de libre disposición, dotando una reserva por capital amortizado por un importe igual al valor nominal de las acciones amortizadas, de la que solo será posible disponer con los mismos requisitos que los exigidos para la reducción de capital social.
Asimismo, este martes se otorgará la escritura pública de reducción de capital y modificación de los estatutos sociales, que se inscribirá en el Registro Mercantil de Vizcaya.
En los próximos días, la compañía solicitará la exclusión de negociación de las 200.561.000 acciones amortizadas en las Bolsas de Madrid, Barcelona, Bilbao y Valencia a través del Mercado Continuo.