La compañía ha anunciado también que escindirá su unidad de televisores, que se encuentra en números rojos desde hace varios años, y despedirá a 5.000 empleados. La japonesa Sony ha presentado sus cuentas del pasado trimestre, en que el registró un aumento del beneficio neto del 70% y un incremento de los ingresos por ventas del 16,4% respecto al mismo período del año anterior. Estos resultados, sin embargo, no han evitado unas previsiones decepcionantes para su ejercicio completo de 2013, que acaba en marzo: estima unas pérdidas de 110.000 millones de yenes (unos 801 millones de euros). La tecnológica ya ha tomado medidas y despedirá a 5.000 empleados y venderá su marca de ordenadores VAIO.
Como ya habían adelantado algunos medios locales, el fabricante ha anunciado la firma de un acuerdo preventa para desprenderse de su deficitaria familia de ordenadores personales. El acuerdo se ha realizado con el fondo de inversión Japan Industrial Partners y no con Lenovo, como se esperaba, aunque no se descarta que acaben en manos de la compañía china.
Además, Sony ha asegurado que escindirá su unidad de televisores, que se encuentra en pérdidas desde hace varios años.
De esta manera, la tecnológica pretende centrarse exclusivamente en la fabricación de ‘smartphones’ y tabletas.
En consecuencia de estas dos operaciones, la empresa tiene previsto reducir unos 5.000 empleos, 1.500 en Japón y 3.500 en el resto del mundo, de aquí a marzo de 2015, según informa Efe.
Por otro lado, la firma japonesa achaca las pérdidas del año fiscal a los costes de la reestructuración que planea, que resultarán mayores de lo estimado en un primer momento, y al mal rendimiento de sus divisiones de equipos de audio y vídeo doméstico, dispositivos y “productos móviles y comunicaciones”.
