La ubicuidad de los dispositivos móviles los convierte en el GPS ideal para los europeos, tal y como sugiere el último estudio efectuado por Comscore, según el cual, durante el mes de marzo los europeos han accedido a mapas desde su smartphone siete veces más que a través de los ordenadores.
Según este informe, que recoge los hábitos de los cinco principales mercados europeos según la firma (Alemania, España, Francia, Italia, y el Reino Unido o EU5), el 35% de los usuarios de smartphones declararon haber consultado mapas desde su dispositivo en marzo de 2012, frente al 49,6% de internautas que lo hicieron a través de sus ordenadores.
La audiencia de mapas de páginas como Google Maps y ViaMichelin desde terminales móviles aumentó un 55% respecto al año pasado, mientras que el llevado a cabo por medio de ordenadores creció apenas un 8%, lo que sugiere, según el analista, “un empleo progresivo y la aparición de un uso ‘irresistible’ mientras están on-the-go”.
El mayor aumento interanual de esta consulta de mapas desde smartphones se dio entre los usuarios alemanes, donde este uso se incrementó en un 89% desde 2010, seguido por España con el 76%. Sin embargo, los europeos que utilizan más sus smartphones para este fin son los británicos, con un 40,2%. España, por su parte, fue tercera en este sentido, tras Alemania (36,1%), con un 35,4% de penetración.
Por marcas, podemos comprobar, en línea con los datos presentados por Gowex para España ayer mismo, que los propietarios de terminales de Apple son los más activos en este sentido: el 53,4% de los usuarios de iPhone consultaron mapas en su smartphone, Google Android ocupó el segundo lugar en cuanto a penetración de empleo desde smartphones con un 39,8%, mientras que Microsoft completa el “Top 3” con el 34,5%.
“Para muchos se está convirtiendo en natural confiar en su dispositivo móvil para ayudar con sus itinerarios y destinos. El buscar las rutas de antemano e imprimir los mapas, quedará pronto para el recuerdo», afirma Hesham Al-Jehani, jefe de Producto de Móvil para Europa de comScore.
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Los smartphones se convierten en los nuevos GPS