En su último informe de ventas, la compañía nipona Sony recoge que su última portátil, PlayStation Vita (PSVita) ya ha superado los 1,2 millones de unidades vendidas. Estas cifras han sufrido un notable incremento desde el lanzamiento del dispositivo en los mercados estadounidense y europeo, el pasado 22 de febrero. Según la compañía, las ventas en estas regiones han estado “por encima de las expectativas”.
La más joven de Sony salió en Japón en diciembre de 2011, y sus cifras de ventas en el país asiático fueron muy discretas, superadas por las de su predecesora, PlayStation Portable (PSP). Los analistas indicaban que, teniendo en cuenta que la campaña navideña no había logrado impulsar estas cifras, el lanzamiento en Occidente sería igualmente decepcionante.
Sin embargo, sus ventas en Europa y EEUU han revertido la opinión de los analistas que ya catalogaban este terminal de fiasco. La razón, según explican, se encuentra en el catálogo actual de juegos, de corte más occidental y poco atractivos para el público japonés, como es el caso de Uncharted: Golden Abyss, el buque insignia de la portátil en su estreno en Occidente.
Con un videojuego debajo del brazo
Jorge Huguet, director de marketing de Sony Computer en España y Portugal, insistía ya, durante la presentación oficial de esta consola, que la principal baza de este dispositivo era “un apoyo de software nunca visto en una consola hasta la fecha” y “las franquicias exclusivas”.
Precisamente las ventas de software demuestran lo acertado de esta apreciación: hasta la fecha, Sony ha vendido más de dos millones de copias de títulos propios de PSVita.
Sony está dispuesta a mantener estos resultados ampliando la oferta de juegos. Su presidente, Andrew House, ha indicado que “colaboraremos con otras desarrolladoras y distribuidoras para ofrecer una línea de software del gusto de todos los públicos”.
