El líder del PP quiere colocar a afines a Sáenz de Santamaría en la ejecutiva. El objetivo es que haya un equilibrio de fuerzas entre esta última y Cospedal. El presidente del Gobierno y líder del PP, Mariano Rajoy, ya tiene la vista puesta en el Congreso Nacional que el partido celebrará el próximo mes de febrero. Un cónclave en el que se presentará por última vez a la reelección, ya que en el siguiente se nombrará a su sucesor o sucesora. Por ello, el popular ha decidido que llevará a cabo cambios en la ejecutiva del partido para que en Génova haya el equilibrio de fuerzas que existe en el Gobierno.
Esto se traduce, según han afirmado dirigentes del PP a El Confidencial Digital, en que “el presidente quiere más presencia de ‘sorayos’ aquí”. Es decir, Rajoy quiere aupar a los órganos de dirección del partido a afines a Soraya Sáenz de Santamaría, lo que supone una mala noticia para la ministra de Defensa y secretaria general de los populares, María Dolores de Cospedal.
La remodelación de Rajoy beneficiaría a la ‘número dos’ del Ejecutivo, que vería a personas de su máxima confianza ganar peso en Génova. Incluso ya estaría pensando en algún nombre para este ‘ascenso’ como el de la alcaldesa de Logroño, Cuca Gamarra, que ya trató de ‘colocar’ en el Gobierno.
El equilibrio de fuerzas que quiere Rajoy entre Sáenz de Santamaría y Cospedal también beneficiaría al actual vicesecretario de Acción Sectorial del PP, Javier Maroto, con el que la vicepresidenta mantiene una buena relación desde la etapa de aquel al frente de la alcaldía de Vitoria, según recuerda El Confidencial Digital. Asimismo, el también ‘sorayo’ Alfonso Alonso, podría salir ganando.
El actual líder del PP vasco y exministro de Sanidad suena desde hace tiempo para un puesto en la nueva ejecutiva del partido. Incluso, como posible secretario general en sustitución de María Dolores de Cospedal. Y es que el presidente del Gobierno quiere que esta última abandone esta responsabilidad y se centre en su trabajo al frente de Defensa.
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