En otras palabras, y de acuerdo con The World Economic Forum, en total cada año se desperdician 1.300 millones de toneladas de comida.
The World Economic Forum se hace eco además de una encuesta realizada en EEUU por la organización sin ánimo de lucro Re-Fed que muestra qué alimentos se desperdician más.
En concreto, el 34% de los productos frescos que entran en la cadena de suministro nunca se consume. Los productos lácteos y las comidas precocinadas también ocupan un lugar destacado en la lista de alimentos que acaban en la basura sin ser consumidos.