El Ministerio de Sanidad de Finlandia ha informado este miércoles de que una turista china ha sido diagnosticada con el nuevo coronavirus chino, lo que supone el primer caso registrado en el país nórdico. La mujer, de 32 años, ha sido ingresada en el Hospital Central de Laponia, en la ciudad de Rovaniemi, donde se encuentra en aislamiento tras abandonar Wuhan, epicentro del brote, hace cinco días. Según un comunicado del Ministerio, «era de esperar que los casos presentados por los turistas también se hicieran evidentes en Finlandia».
«El riesgo de propagar la enfermedad en Finlandia sigue siendo muy bajo, así que no hay por qué preocuparse», ha asegurado por su parte el Instituto Nacional de Salud y Bienestar finlandés (THL).
Las autoridades sanitarias locales continuarán trabajando de forma conjunta con el THL para abordar la situación. Hay alrededor de 15 personas potencialmente expuestas a la infección, por lo que están sometidos a supervisión médica.
«Finlandia está preparada para posibles casos. La asistencia sanitaria y los laboratorios cuentan con modelos operativos. Los hospitales tienen la capacidad de investigación necesaria para tratar las infecciones por coronavirus en condiciones de aislamiento», han aclarado.
Aunque China es el epicentro del brote y el país más afectado, el coronavirus se ha extendido ya a otros países del sureste asiático y también se han detectado casos en Europa y América.
Los signos comunes de infección incluyen síntomas respiratorios, fiebre, tos, y dificultades para respirar. En casos más graves, la infección puede causar neumonía, síndrome respiratorio agudo severo, insuficiencia renal e, incluso, la muerte.
En 2003, más de 600 personas murieron en todo el mundo (349 en China) a causa del SARS o síndrome respiratorio agudo, que dejó 5.327 afectados en nueve meses.
