Manifestaciones contra la violencia machista
El estudio, elaborado por ONU-Mujeres y la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNDOC), alerta de que los feminicidios continúan afectando a todas las regiones del mundo sin excepción.
Aunque la cifra es ligeramente inferior a los 51.100 casos estimados en 2023, el organismo insiste en que esta variación no supone una reducción real, sino que responde a diferencias en la disponibilidad de datos nacionales.
La investigación identifica a África como la región con más víctimas en términos absolutos, mientras que Europa presenta las tasas más bajas, aunque advierte de un grave problema global de falta de datos que impide dimensionar con precisión la magnitud real del fenómeno.
ONU-Mujeres alerta de que los feminicidios siguen sin mostrar una tendencia a la baja
El informe estima que 22.600 mujeres y niñas fueron asesinadas por parejas sentimentales u otros familiares en África, lo que la convierte en la región con más casos registrados. La tasa asciende a tres víctimas por cada 100.000 mujeres, una cifra marcada por la escasez de información en muchos países africanos.
En las Américas y Oceanía, las tasas también se sitúan en niveles preocupantes, con 1,5 y 1,4 por cada 100.000 mujeres respectivamente. En Asia y Europa, las cifras descienden a 0,7 y 0,5, aunque ONU-Mujeres advierte de que la limitada documentación disponible fuera del ámbito doméstico oculta una parte significativa del problema.
La investigación muestra que la tasa de feminicidios cometidos por parejas o familiares en Europa ha disminuido de forma “lenta pero continuada” desde 2010, con especial incidencia en países del norte, este y sur del continente.
Europa mantiene una tendencia a la baja desde 2010
En las Américas, la evolución se mantiene “relativamente estable” en los últimos catorce años, pese a los esfuerzos legislativos de varios países que han tipificado el feminicidio o lo han incorporado como agravante penal.
El estudio destaca que la mayoría de los asesinatos de mujeres en la esfera privada son cometidos por sus parejas. En 2024, el 64% de los feminicidios de Europa y el 69% en América fueron perpetrados por la pareja sentimental.
La violencia doméstica sigue siendo el origen de la mayoría de feminicidios
El documento recuerda que, mientras el 60% de las mujeres asesinadas lo fueron en su propio hogar, solo el 11,2% de los hombres murieron en el ámbito doméstico. Para Naciones Unidas, esta diferencia confirma que el hogar es el lugar más peligroso para mujeres y niñas.
Los organismos de la ONU subrayan que los feminicidios suelen ser la culminación de violencias previas, no incidentes aislados. Entre los factores detectados figuran:
Historial de violencia previa
Estrangulamientos no letales
Acoso
Ruptura de la relación
Abuso de alcohol u otras sustancias
Ausencia de apoyo social
Acumulación de situaciones estresantes
Además, ONU-Mujeres señala que una de cada cuatro mujeres de entre 15 y 49 años ha sufrido violencia física o sexual por parte de su pareja al menos una vez en su vida, lo que evidencia una violencia estructural arraigada en normas sociales que subordinan a las mujeres.
Los organismos destacan que varios países han implementado medidas de prevención primaria, como programas educativos orientados a cambiar comportamientos y mejorar las habilidades de relación.
América Latina encabeza las reformas legales específicas sobre feminicidio
En América Latina, numerosos países han aprobado leyes específicas contra el feminicidio y han creado unidades especializadas en policías, fiscalías y tribunales. Además, campañas globales como “Ni una menos” o “Me Too” han contribuido a visibilizar el problema y generar conciencia pública.
| Región | Tasa por 100.000 mujeres | Comentario |
|---|---|---|
| África | 3,0 | Mayor número absoluto de víctimas |
| Américas | 1,5 | Estabilidad en las cifras desde 2010 |
| Oceanía | 1,4 | Tasa elevada en comparación con otras regiones |
| Asia | 0,7 | Datos limitados fuera del ámbito doméstico |
| Europa | 0,5 | Tendencia a la baja desde 2010 |
A pesar de los avances normativos, Naciones Unidas insiste en que los feminicidios siguen produciéndose a niveles “preocupantemente altos”, impulsados por desigualdades de género persistentes y la falta de datos en gran parte del mundo. El organismo reclama reforzar la prevención, ampliar la documentación y actuar sobre las causas estructurales para frenar una violencia que mata a 137 mujeres y niñas cada día.
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